Instituciones como la Embajada Británica, la multinacional SAGE, el Despacho Cremades & Calvo-Sotelo y la ONG Oxfam Intermón, entre otros, han promovido la creación del primer Foro para la Competitividad de la Pyme. Un foro que nace con el objetivo de crear un diálogo por la competitividad y la innovación del sector de pequeñas y medianas empresas en España y así dinamizar, tras la crisis, el sector productivo más importante de nuestro país.
En su primera reunión, el Foro identificó que uno de los principales problemas al que se enfrenta la PYME, y con ello la Administración Tributaria es la evasión y la elusión fiscal. Un fraude fiscal que en España representa el 25,3% del PIB, porcentaje que supone la evaporación de más de 88.000 millones de euros de impuestos al año. Estas circunstancias afectan negativamente a la productividad y competitividad del sector PYME tanto a nivel nacional como internacional, generando una situación de desigualdad entre las PYME que cumplen con el imperio de la ley y las que no. La elusión fiscal y las prácticas de planificación fiscal agresiva de algunas grandes empresas también generan una competencia desleal que afecta a la competitividad de las PYME y son un elemento motor de la desigualdad en España.
Esta situación ha sido evidenciada recientemente por los Informes emitidos por la OCDE, de 11 de agosto, y la Comisión Europea de 4 de septiembre, en donde se hace constar que España habría dejado de recaudar más de 23.700 millones de euros en IVA en 2012 y 2013 debido al fraude siendo además el país de Unión Europea que menos invierte en medidas para luchar contra el fraude fiscal y la economía sumergida.
Estas cifras devastadoras preocupan al sector PYME español y así lo refleja el Decálogo sobre “Las 10 peticiones de las Pymes para el Gobierno” publicado el pasado mes de julio y en donde la lucha contra el fraude, la corrupción y en favor de la trasparencia y la honestidad política, son algunos de los principales requerimientos que este sector PYME hace al Gobierno en el año 2015.
Así, desde este primer Foro de Competitividad se propusieron distintas alternativas de cara a dar solución al problema del fraude fiscal en España. Una de ellas deriva de las recomendaciones hechas por la OCDE en el marco de este debate, y que tienen como instrumento el uso de la tecnología como herramienta necesaria para la corrección del fraude fiscal. Se trata de SAF-T, una estructura de archivo que recoge información contable fiable y que permite una mejora de la información a disposición de la Administración Tributaria como aspecto clave en la detección rápida y eficaz de las defraudaciones tributarias. Esta solución ha sido implementada con éxito en algunos países europeos como Portugal, Francia, Luxemburgo y Austria. Por otro lado, la Comisión Europea ha lanzado un paquete de propuestas sobre transparencia y lucha contra la evasión y elusión fiscal, que estarán en consulta pública y en debate en la agenda política en los próximos meses. La transparencia y acceso público a la información fiscal es un primer paso para desincentivar esquemas fiscales perjudiciales.
La próxima edición del Foro tendrá lugar en el primer trimestre de 2016 y a través de él, se pretende comenzar a dialogar con el nuevo ejecutivo que surja de las elecciones, sobre el tema de la competitividad y dinamización del sector PYME en España y sobre la necesidad de implementar medidas efectivas contra el fraude fiscal y la economía sumergida.
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