La sanción de 10,5 millones de libras (12,2 millones de euros) fue impuesta el lunes pasado por la Autoridad Británica de Servicios Financieros (FSA por sus siglas en inglés).
12,2 millones de euros será el monto que el banco HSBC de Inglaterra tendrá que pagar por malvender productos de inversión a adultos mayores. La multa, impuesta por la FSA, es el mayor gravamen que el regulador en el sector de banca comercial ha asignado.
Además, la entidad bancaria estima que deberá abonar a los damnificados un valor total de 34 millones de euros con objeto de indemnización.
Según un comunicado de la FSA, una subsidiaria del banco británico, NHFA Limited, aconsejó –entre 2005 y 2010- a 2485 clientes invertir en productos como bonos. La mayoría de dichos compradores dependían de esa inversión para financiar su retiro. Además, muchos de ellos ya se encontraban en residencias de ancianos.
En consecuencia, la FSA concluyó en que la subsidiaria del banco había asesorado inadecuadamente a los damnificados y vendido el producto de forma inapropiada ya que la expectativa de vida de los ancianos era inferior al plazo de 5 años recomendando como mínimo para invertir. Por este motivo, cuando los compradores retiraron el dinero antes del plazo estipulado vieron disminuido sustancialmente su capital.
Tracey Mcdermott, responsable de la unidad de delitos financieros del organismo, planteó lo siguiente con respecto al NHFA: "abusó de la confianza de clientes vulnerables al venderles productos inapropiados".
Desde el banco británico se admitió la mala actuación de la subsidiaria y se aseguró que se había iniciado una investigación interna.
Opinión
PASBBA
opinión
ver todosNORDELTA S.A.
Alfaro Abogados
Berton Moreno IP Law
Eskenazi Corp