Al parecer, el continente africano se ha convertido en el destino estrella de varios bufetes de abogados internacionales. En esta oportunidad, Baker & McKenzie ha inaugurado una oficina en Casablanca, Marruecos.
Cabe recordar que hace apenas un mes, la firma de origen norteamericano había abierto una delegación propia en Sudáfrica aprovechando la sede y el personal de la extinta Dewey & Lebouef.
La entrada de esta nueva oficina en Casablanca se produce a través de la integración de la firma August & Debouzy que ya funcionaba en el país y que se encuentra dirigida por el socio Kamal Nasrollah.
“Este equipo goza de gran prestigio y cuenta con experiencia principalmente en el asesoramiento en operaciones societarias complejas y litigios en Marruecos, así como en operaciones transfronterizas, especialmente con países del Norte y Oeste de África y de Oriente Medio”, explicaron fuentes de Baker refiriéndose a la oficina.
Con respecto al nuevo destino elegido por la compañía para trabajar, los socios directores de Baker en España, Esteban Raventós y Luis Briones, sostuvieron lo siguiente: “estamos muy comprometidos con África y con los clientes que llevan a cabo su actividad empresarial en este continente, cuyo desarrollo es cada vez mayor, ya que representa casi una cuarta parte de la inversión extranjera directa”.
Por su parte, el país marroquí continúa expandiéndose a nivel jurídico debido a que la decisión de Baker de instalarse allí no fue aislada. En la presente temporada, Clifford Chance, Allen & Overy y Norton Rose han abierto oficinas en la región. Además, bufetes como DLA Piper también piensan en reforzar África.
Asimismo, un gran número de firmas españolas se encuentran funcionando en Marruecos. Este es el caso de Garrigues, Cuatrecasas, Gonçalves Pereira, Martínez-Echevarría y Ferrero, mientras que CMS Albiñana & Suárez de Lezo ostenta una oficina en Casablanca a través del bufete francés Bureau Francis Lefebvre.
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