A través de la resolución 102/2010, la Secretaría de Comunicaciones dispuso que el traspaso de Fibertel a otros proveedores no tenga costo para los usuarios, estableciendo que las empresas que reciban a los usuarios que “decidan migar “, según establece la normativa, “no podrán percibir en concepto de abono y/o cualquier otra denominación contractual que utilizaran los prestadores un valor superior a aquel que abonan por la utilización de los servicios de la ex Fibertel”.
Si bien la resolución establece que "los prestadores de servicios de valor agregado y/o Internet que reciban a aquellos usuarios y clientes que decidan migrar los servicios que brindaba la ex licenciataria Fibertel SA no podrán percibir bajo ningún concepto derechos de conexión, de instalación, alquiler de módem y/o cualquier otro cargo de acceso al servicio, independientemente de la denominación usualmente utilizada por cada prestador", el Gobierno no aclaró quién pagará los costos operativos, administrativos y tecnológicos de una eventual migración de usuarios.
Desde algunos sectores sostienen que ante la caducidad de la licencia de Fibertel, las telefónicas que tomen a los clientes que migren de esta operadora no se encuentran preparadas operativamente, señalando que no cuentan con la cantidad de módems para atender un volumen tan grande de usuarios en tan poco tiempo.
De acuerdo a lo publicado por el diario La Nación, al ser consultadas sobre la aplicabilidad de la reciente medida, desde Telefónica aseguraron que la empresa se encuentra preparada técnica y comercialmente para incorporar nuevos clientes a su servicio, mientras que desde Telecom no respondieron ante tal consulta, según afirmó el matutino.
En relación a dicho tema, en las próximas horas Cablevisión – Fibertel efectuará un planteo ante la Justicia para frenar la medida del Gobierno.
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