El 23 de julio, Paraguay exportó por primera vez en su historia, 20 toneladas de alimentos derivados del cannabis no psicoactivo (cáñamo industrial) a Holanda y a otro país de la Unión Europea, convirtiéndose así en el primer país latinoamericano en exportar alimentos derivados de la mencionada variedad de la planta Cannabis. Luego, el 4 de agosto, Paraguay marcó otro hito, al prepararse para exportar aceite, proteínas y otros derivados del cáñamo industrial al mercado de los Estados Unidos y, por primera vez, a Australia y Canadá.

Este desarrollo del mercado del cáñamo industrial en el Paraguay se da en consonancia con el crecimiento del mercado del cannabis legal, en general, a nivel global. Por ejemplo, en el Reino Unido hay una expectativa de que el sector del cannabis medicinal (CBD) genere en el 2021, ventas por USD 946 millones, pudiendo alcanzar los USD 1.300 millones en el 2025. Incluso, las empresas especializadas en el cannabis terapéutico o en productos derivados del aceite del cannabis pueden cotizar en la Bolsa de Londres.

Las ventajas del cáñamo industrial

Con más de 10.000 años de historia, el cáñamo industrial posee una variedad de derivados, usos y potencialidades. Entre las numerosas ventajas del cáñamo, se destaca por ser un cultivo resistente a las heladas y las temperaturas extremas. Es, asimismo, aprovechable en su totalidad, lo cual beneficia a los pequeños productores, que ya cuentan con el mercado asegurado para la producción obtenida.

Actualmente, del cáñamo industrial se fabrican textiles, papel, fibra y plástico. Y de la semilla se hacen alimentos y suplementos. Además, presenta excelentes condiciones para incorporarse en rotaciones de cultivo, pues las incompatibilidades con las cosechas que lo preceden son despreciables, y es el antecedente ideal, porque que deja el terreno en un buen estado por lo que, cosechas posteriores podían llegar a mejorar su producción.

El cáñamo industrial también tiene aplicación en el área de biocombustibles, pudiendo reemplazar a otros biocombustibles de origen vegetal (soja, maíz, aceite de palma, etc.), atendiendo a que es más sustentable (su ciclo es más rápido, necesita menos agua y fertilizantes y, adicionalmente, cerca del 70% de los nutrientes vuelven al suelo durante y después de la cosecha).

Por último, vale también mencionar la aplicación del cáñamo industrial en el almacenamiento de energía ya que el cáñamo puede ser utilizado como componente en supercondensadores para el almacenamiento de energía. Los estudios afirman que este supercondensador sería más económico que los de grafeno, el material utilizado actualmente y, además, almacenaría casi el doble de energía.

Cáñamo industrial: cultivo de interés nacional para el gobierno paraguayo

En el Paraguay, el cáñamo industrial está regulado por el Decreto 2725/19, que establece las condiciones generales para su producción, lo que incluye la obtención de una autorización del Ministerio de Agricultura y Ganadería (“MAG”)”. La autorización tiene una vigencia de 5 años y puede renovarse por periodos iguales.

No obstante, en agosto del 2020, el Poder Ejecutivo emitió el Decreto 3999/20, por el cual se creó el programa nacional para la promoción, fomento, cultivo, desarrollo de la producción y comercialización e investigación del cáñamo industrial y se declaró al mismo de interés nacional. Con la emisión de este decreto, se materializa un verdadero compromiso del gobierno paraguayo con el desarrollo del mercado del cáñamo. Esto se evidencia con disposiciones como la del artículo 5 del decreto, que establece el otorgamiento de líneas de créditos bajo las condiciones y modalidades más favorables, para el estímulo, la producción, el desarrollo, el fomento y la comercialización del cultivo del cáñamo; o el artículo 6, que atribuye al Poder Ejecutivo la facultad de “disponer las partidas presupuestarias para el financiamiento del Programa Nacional, la promoción, fomento, cultivo, desarrollo de producción, comercialización e investigación del Cáñamo Industrial, que se adicionaran al presupuesto del Ministerio de Agricultura y Ganadería”.

En definitiva, la explotación del cáñamo industrial en el Paraguay se presenta como un rubro nuevo y atractivo para pequeños y grandes productores, teniendo en cuenta los múltiples beneficios de la cosecha de la planta y el importante incentivo que se da, gracias la promoción y fomento al cultivo, desarrollo de la producción y comercialización e investigación de este.

Por Raúl Pereira Fleury y Montserrat Puente