El Decreto Nº 242/2017 establece que en el transcurso de 2018 todas las instituciones que brindan servicios de salud deberán informatizar las historias clínicas de sus pacientes, que pasarán a formar parte de un sistema nacional cuyo objetivo es facilitar la atención de los usuarios en cualquier lugar del país.
En el marco de un desayuno informativo organizado por y K2B Health, CPA FERRERE y FERRERE Abogados para analizar el tema, Martín Fridman, abogado senior en el Departamento de Life Sciences de FERRERE indicó que uno de los principales desafíos para los prestadores será el resguardo de la información. Como titulares de bases de datos, las instituciones serán responsables de mantener la confidencialidad sin dejar de cumplir con la obligación de compartir las historias en tiempo real con otros servicios de salud cuando la atención del paciente así lo requiera.
"Si alguien tiene un evento asistencial en cualquier lugar del país, con la historia clínica electrónica el trabajador de salud que atienda al paciente tendrá a su disposición la mayor cantidad de información de esa persona, sin importar en qué prestador se haya atendido antes", destacó.
Fridman explicó que la normativa tiene como fin garantizar el derecho a la protección de salud de todos los habitantes, siendo una herramienta fundamental para elaborar datos estadísticos e informes epidemiológicos y para desarrollar políticas sanitarias preventivas.
Por su parte Paloma Alonso, CEO de la empresa de consultoría sanitaria española Globesalud, repasó la experiencia española, que en diez años de puesta en marcha del sistema ha logrado informatizar el 78% de las historias clínicas, lo que requirió una inversión cercana a los 350 millones de euros.
Marcela Corbo, directora de H2B Health, subrayó la necesidad de trabajar en conjunto, fomentando la interinstitucionalidad e interoperabilidad y compartiendo experiencias y conocimientos, mientras que Marcelo Telesca, gerente de Consultoría de CPA Innovation, presentó en forma gráfica el uso de las prescripciones en el sistema de salud.
"A nivel global, una de cada diez indicaciones médicas poseen un error de alguna clase. Las prescripciones electrónicas son un mecanismo para prevenirlos y mejorar la seguridad del paciente, reduciendo los costos debido a la disminución de efectos adversos y reingresos, entre otros factores", explicó.
Agregó que la puesta en marcha de la historia clínica nacional permitirá evaluar el valor económico de los tratamientos, eliminar prescripciones duplicadas, contar con una mirada más global del paciente para efectuar el diagnóstico y realizar la trazabilidad de los fármacos de manera electrónica.
Finalmente, Bruno Gili, socio de CPA FERRERE, señaló que "la etapa de implementación es muy desafiante. Tenemos un equipo especializado y con muchas fortalezas que nos permite aportar conocimiento en los distintos niveles que las organizaciones requieran".
Artículos
Barreiro
opinión
ver todosAlfaro Abogados
PASSBA
Bragard
Kabas & Martorell